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Ten mi hombro, apóyate en él

Advertencia: no es un texto de autoayuda  Pilar, Pitita y Pía eran las mejores amigas del mundo. Compartían un grupo de WhatsApp llamado 3.14 en clara referencia al valor del número pi, la silaba primera de todos sus nombres. Piedad, aunque era una buena muchacha, no había logrado formar parte del grupo por enana ySigue leyendo «Ten mi hombro, apóyate en él»

El perverso de medianoche

 Edgar Dell’Anno encontró piel roja, ojos carentes de iris pero rebosantes de iras, colmillos saliendo de la boca del derecho y a través y un par de cuernos en el espejo. Comprendió que se había convertido en un monstruo. Tras dedicar unos minutos a la pena, el remordimiento, la conmiseración y la aflicción con brevesSigue leyendo «El perverso de medianoche»

Vaya película que se han montado

 Durante el estreno de Arma letal V mi novia me señaló al chico sentado tres filas más allá. Era la suya una triste figura, la de un jovenzuelo pacato, inofensivo como un beso dibujado con kétchup, que se ocultaba del mundo tras unas lentes de alta graduación que afeaban un rostro ya de por síSigue leyendo «Vaya película que se han montado»

Slimes de fresa y un bebé con bigote (Capítulos 4 a 7)

04 – Donde come uno…  La sucesión al trono era un asunto delicado que no convenía tratar en presencia del rey, a quien los asuntos políticos le suponían un verdadero quebradero de cabeza que prefería evitar, casi tanto como el de La Profecíaaa. Hombre aficionado a los prostíbulos, cuando no se encontraba en agradable compañíaSigue leyendo «Slimes de fresa y un bebé con bigote (Capítulos 4 a 7)»

Pompas de jabón

 Pasé toda la tarde haciendo muñecos de nieve con plastilina en el patio trasero de mi casi ataúd. Uno de los componentes fundamentales de este misterioso material moldeable es la vaselina, frecuentemente empleada en los ambientes underground para facilitar los encuentros de carácter íntimo y carnal entre homínidos dados al deleite sensual esporádico. Dicho deSigue leyendo «Pompas de jabón»

Ni otoño ni primavera

 Mis manos se perdieron sin las suyas mientras ella gritaba «no me dejes» para hacerse escuchar por encima del frenético murmurar de los trenes, bestias de hojalata, gusanos venidos a más, deseando perderse por los agujeros que sortean luz y otras estaciones.  Sus manos insistieron en buscar las mías y un uniforme arrugado la arrastróSigue leyendo «Ni otoño ni primavera»

Slimes de fresa y un bebé con bigote (Capítulos 1 a 3)

Dramatis personae Cementodentro: nigromante Cerdo: un cerdo Charocrástrico: consejero del rey Finisterrianos del reino de Finisterra Joddor: gelatina de fresa Joerien (El Jöerien): héroe de esta grande historia Maestre Falomir: anciano muy versado Mireien: lavandera de indudables encantos Murcianicos: los habitantes de Submersa Libreria Nkafatzídes: hermano pequeño de Joerien Oddseariom: gelatina de fresa Panblandito: hermanoSigue leyendo «Slimes de fresa y un bebé con bigote (Capítulos 1 a 3)»

Glory Hole, señora García, no póster gay

 Fue un hecho insólito. La señora García entró en el baño de señoras para orinar después de cuatro consumiciones de alto contenido etílico y retocarse el maquillaje de los ojos y la nariz. Cerró la puerta del cubículo tenuemente iluminado, se sentó en la taza, consultó las últimas publicaciones en Instagram (corazón para el conejoSigue leyendo «Glory Hole, señora García, no póster gay»

El puff de la Montseta

 Montseta ganó un puff[1] lanzando coliflores pasadas de fecha al Enano sobre el Barreño de Agua Bechito Di Pito en la barraca de feria instalada en Villa Yoli durante los festejos en conmemoración del Descubrimiento de Murcia (qué hermosa eres). Al llegar a casa cenó dos guisantes sonrientes y tras escribir una crítica de 4.813Sigue leyendo «El puff de la Montseta»

¿Qué pensaría de mí un nutricionista?

 Salve, lores y damas, ¿estáis pasando un feliz día? Espero que así sea y que los pajaritos canten sus aterciopeladas canciones. Soy un gul y por lo tanto me alimento de cadáveres, a poder ser poco hechos y con guarnición de papas, si bien no desprecio un buen incendio de fin de semana. Mi procederSigue leyendo «¿Qué pensaría de mí un nutricionista?»